Gemelos, mellizos y primos… Sigo hablando de coches.

Ha sido hoy, después de una de esas conversaciones de sobremesa de domingo en familia. Cuando volvía a casa he tenido un «deja-vu» y he recordado la charla al adelantar a un Infiniti Q30.

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Un coche precioso, con un aspecto musculoso y una calidad intachable viniendo de la firma de lujo de Nissan… O no. Y es que este coche no tiene su propio ADN, pero no le sienta nada mal.


Todo ha empezado cuando uno de los comensales, que tiene un Opel Mokka, me ha dicho que el otro día paseando por la calle vio un coche que pensó que era como el suyo pero al fijarse comprobó que no era el mismo, sino que era un Chevrolet Trax. Obviamente su percepción era de que se parecía mucho al suyo.

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Efectivamente, y es que al igual que el Infiniti Q30, no tienen su propio ADN. O dicho de una manera más correcta, comparten el mismo origen.

Tanto Opel como Chevrolet pertenecen al holding General Motors, de manera que si la «casa madre» desarrolla un modelo X, es completamente lógico que las marcas del grupo lo adapten a su imagen para que, con el coste del desarrollo de un modelo, se puedan vender tantos como firmas tenga el grupo.

Para hacer esto más fácil de entender mientras compartíamos mesa y mantel he recurrido a un ejemplo que todos conocemos. Grupo PSA (Peugeot-Citroën) con sus Partner y Berlingo:

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Se trata de coches que pertenecen a la misma casa, comparten prácticamente todos sus elementos y luego cada marca les da su imagen o el enfoque que ellos quieren.

Esto ha sido fácil de entender ya que son marcas que pertenecen al mismo grupo (y populares), pero aquí con vosotros quiero profundizar algo más.

A día de hoy a estas sinergias se les ha dado una vuelta de tuerca, ya que hay muchas colaboraciones entre marcas que no tienen nada que ver entre sí pero deciden hacerlas.

Sigamos con el ejemplo anterior, pero un escalón más arriba. Con sus hermanas mayores Expert y Jumpy… Y su «prima», la Toyota Proace.

JumpyExpertProace.jpg

Toyota no tiene nada que ver con PSA, pero tienen un acuerdo de colaboración por el que los franceses construyen la furgoneta de Toyota (de la que casi todos los componentes son PSA) con su imagen de marca.

Este acuerdo vino después de que anteriormente firmaran otro por el que Toyota les fabricaría a los franceses los coches más pequeños de su gama, los C1, 108 y Aygo:

Aygo108C1.jpg

En este caso las diferencias son más evidentes y cuesta más encontrar el parecido.

Para otras marcas todo ha empezado compartiendo mecánicas, como le ha pasado a Mercedes con… Renault. Sí sí, Renault. A algunos ya os sonará este tema.

Los de la estrella no estaban por la labor de desarrollar un motor diésel pequeño ya que lo suyo es el lujo acompañado de motores con más cilindros que dedos tiene una mano, de manera que buscaron a alguien que les vendiera un motor diésel pequeño, de poco consumo y muy robusto para que estuviera a la altura de la marca. Y ahí estuvo Renault para ofrecerles su 1.5 dCi que se monta en los modelos con apellido 180 CDI de la marca, el modelo que más se ha beneficiado de esta sinergia ha sido el Clase A.

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De esta colaboración fueron surgiendo otros «combinados» que también han resultado curiosos.

Tan curiosos como el Twingo y su «primo» el Smart. Smart es la marca de vehículos urbanos de Mercedes-Benz. Twingo y los ForTwo y ForFour de Smart comparten alma y esencia puesto que salen de los mismos padres:

SmartForFourTwingo.jpg

En este caso el parecido también es innegable, pero quiero ir un poco más allá… Y retomar el «deja-vu» que me ha llevado a escribir sobre este tema.

Infiniti, marca de la que os hablaba en un principio, es la marca de lujo de Nissan. Nissan desde 1999 pertenece al grupo Renault, marca con la que Mercedes-Benz tiene un acuerdo tal como hablábamos antes.

Y es de este enrevesado de marcas, grupos y contratos de donde salen estos hermanos mellizos:

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Vale, de acuerdo, incluso a mí me costó en su momento encontrar la similitud, pero una vez conoces la historia, todo encaja.

En el caso del GLA y el Q30 la estética no se comparte (las formas de uno recuerdan al otro porque llevan el mismo «esqueleto») pero técnicamente son el mismo coche.

Motores, cajas de cambio, tracciones, etc. Todo es igual, incluyendo el motor 1.5 dCi de Renault para los diésel de 110cv, pero con algunas limitaciones ya que hay algunos motores que en el Infiniti no están disponibles, como son los 200CDI de 136cv del GLA o el 2.0 turbo de gasolina con 360cv (el motor de 2 litros más potente del mercado) de los GLA 45 AMG.

En la mayoría de casos incluso el más mínimo detalle que piensas que pueda ser original de cada uno, no lo es:

Hoy en día estas colaboraciones son mucho más habituales de lo que muchos piensan y podría hacer quince entradas más del blog hablando de ellas, pero si teníais dudas sobre el tema, aquí tenéis unas coordenadas para situaros.

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